Diente de león.

Seguiré pidiendo deseos aunque no crea en ello porque de algo hay que vivir. Seguiré soplando con los ojos cerrados las velas de cumpleaños, las pestañas caídas y el diente de león, seguiré tocando madera, seguiré esperando un regalo cuando me ponga del revés los calcetines, seguiré atragantándome con las doce uvas de la suerte, seguiré apoyando el pie derecho al salir de la cama, seguiré deshojando tréboles de tres hojas, seguiré creyendo que la cima está cada vez más cerca,  seguiré muriendo de optimismo porque de algo, como te digo, hay que vivir.

Seguiré pidiendo deseos aunque no crea en ello porque de algo hay que vivir. Bailaré bajo cualquier tormenta de verano con la mejor de mis sonrisas, seguiré tirando monedas en las fuentes, seguiré creyendo que si me pita un oído es porque están hablando bien de mi, seguiré celebrando pisar el excremento de un perro, seguiré huyendo de la mirada de los gatos negros, seguiré teniendo cuidado de no derramar la sal y seguiré pensando que lo peor llegó pero está terminando porque de algo, de lo que sea, como te dije, tenemos que vivir.

Seguiré pidiendo deseos aunque no crea en ello porque de verdad que de algo quiero que vivir. Seguiré cruzando los dedos hasta que me duelan, seguiré pidiéndolos cuando encuentre una moneda en el bolsillo del pantalón, seguiré comprando lotería de Navidad "por si acaso", seguiré celebrando cruzarme con dos monjas vestidas completamente de blanco, seguiré creyendo en los números pares, seguiré creyendo que algunos sueños significan cosas buenas, seguiré pensando ( a veces) que merece la pena ser buena persona.

Seguiré creyendo en todo, hasta que la mente diga basta, hasta que el mar ya no sea suficiente horizonte, hasta que ya no quede nada más que desear, hasta que no me quede más en que creer que en tu sonrisa, hasta que caiga en la cuenta de que quizá ya haya conseguido cumplir todos mis deseos. Pero aún con todo eso, créeme, seguiré pidiéndolos.

Seguiré creyendo que los deseos se cumplen. Llamadme iluso, pero lo seguiré creyendo.

Porque la vida son dos dias y de algo, de lo que sea, tenemos que vivir.